ERÓTICO CONCIERTO
Tocar quisiera tu mágico violín,
o ensayar mi melodía en tu guitarra;
y cantar, y cantar hasta morir al fin,
así como lo hacen las cigarras.
Que se escuche el retumbar de tu acordeón,
al colocar mi saxofón en tu cintura;
y que tu alma se convierta en diapasón,
acariciando el laúd de tu hermosura.
Que con ansias la trompeta de tu boca,
emita sinfonías en mi honor
y que el piano de tu cuerpo sea abrebocas
que incentive el pentagrama de mi ardor.
Que el bajo de tu vientre me enamore,
con notas de tus labios entreabiertos;
y que el par de tus maracas enarbole...
¡que comience nuestro erótico concierto!
Jesús Núñez León