UNA NOCHE EN EL MAR

UNA NOCHE EN EL MAR 

Una noche en el mar, ese es mi sueño;

en la arena, nuestros cuerpos retozando;

tú, anhelante; yo por ti, feliz, risueño;

con tus pétalos, goloso, mordisqueando.

Una noche en el mar sólo quisiera,

una noche en la que estés dispuesta a amarme;

una noche sin pudor y sin fronteras,

con tu carne restregándose en mi carne.

Una noche en el mar, sin ataduras;

bajo las estrellas, por completo a solas;

entregados, sin freno, a mil locuras;

arrullados por el canto de las olas.

Una noche en el mar te está pidiendo,

un hombre que de mar no ha sido nunca;

pero es grande la ilusión que estoy teniendo,

de que en el mar mi pasión no será trunca.

Una noche en el mar, desinhibidos,

tú loca y yo guardián de tu locura;

con mi cuerpo en el tuyo confundido,

desbordándose mi dique de ternura.

Una noche en el mar, nomás te pido;

al embrujo de tu amor, sé complaciente;

será el máximo placer que habré tenido

y, después, podré morir piadosamente.


                         Jesús Núñez León