¡QUÉ MÁS SE PUEDE PEDIR!
Una cosa rara siento
cuando tu cuerpo envenena
las ansias que por ti tengo;
y por más que me contengo,
en torrentes se derrama;
noto tu aroma exquisito
y, tras tu orgásmico grito,
quedo rendido en tu cama.
Me duermo como un lirón,
reviviendo tus caricias;
como bálsamo de amor;
y despierta mi apetito
el olor de huevos fritos;
y, apenas abro los ojos,
me besan tus labios rojos
y me das un cafecito.
-Recuéstate en mi regazo-
te oigo entre sueños decir;
y comienza el resurgir
no me puedo resistir,
tu me vuelves a rendir
con tu pasión desatada;
y me duermo en tu almohada,
¡qué más se puede pedir!
Jesús Núñez León
Cel. 0416 6921317
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